Y yo...
Sólo te pediré que leas una a una
las cartas que escribí de madrugada...
¡Las cartas para nadie!
¡Las cartas para el hambre!
¡Las cartas para ti!
Mis palabras de sauce derramadas
Las balas que lanzaba
Mis palabras de incendio maldiciendo tu nombre
El verdadero recuerdo de que mi amor era cierto
La prueba irrefutable que tendrás
de mi inocente espera:
pidiéndote a mi mundo
haciéndote del aire
soñándote sin mares
y al desnudo
en la mujer de aire
en la mujer
de mí
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1 comentario:
Bonitos versos los que nos dejas.
Un abrazo.
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