Detrás de la muchacha de los ojos rasgados
donde se pierde mi llanto
y se acaba mi sal y mi arena y mi ternura
mis negras horas ciclotímicas
son sólo la incoherencia
y el ciclo-locura 
y el manso remanso que busca la orilla
 de la calma:
levantan sus velas al horizonte mis horas
 y mis alas
y a veces son rasgadas velas sin rumbo
(pena mía)
y a veces blancas telas con el canto
 de mi dicha remando los soles 
(cándida esperanza mía)
y en cada azul que no alcanzo
 para pintarte los sueños
que tú estás esperando
un azul se pierde volando hacia las estrellas
y allí nadie respira, ni nadie habita, ni habla, ni nadie tiembla, ni dice nada
y por debajo del aire, 
las sombras
aquí en el vano mundo de los hombres
repleto ya de sombras
aquí:
 no hay nadie,  ni nada ya que se moje
en llantos pétalo
 
aquí no quedan amapolas en los campos
ni queda lluvia
ni sonrisas niñas frente a nuestros ojos
aquí se apaga la vida en un instante
 y mi corazón y el tuyo
se desenlazan de sus lazos a destiempo
y a deshora
y arriba inmenso cielo
 allí en el infinito más alto
sólo está Dios sentado sobre su reino
 sólo el aire duerme y el aire nos vela
y el alma mía para el aire vuela
y yo quiero y quiero:
que respiremos la luz de astros al despertarnos mañana…
 no hay más nadie que el murmullo de los astros
detrás de la muchacha de los ojos rasgados
detrás de mi mirar
no  hay nada, ni nadie
sin tus soles
Detrás de la muchacha de los ojos rasgados
hay una noche infinita que nunca duerme,
 ni calla, ni enciende, ni se oculta
y está la escriba que relata las horas cansadas
y el aire muere
y enmudece el tiempo en los ecos 
de los silencios nuestros
Detrás de la muchacha de los ojos rasgados
hay un millón de sueños desdibujándose
una mujer 
hechas sus manos de arena
y su cuerpo de mimbre
un ser universo de nuevo en ciclotímica rueda
 danzándose
y quiere:
ser la ira vencida  del mundo
y que quiere ser la dulzura en la tierra
y cuerpo a cuerpo y beso a beso y piel a piel
cándido amanecer prendido en llamas
y en la voz del canto de un niño poeta
renacer del beso 
del anhelo susurrado por los labios
y  otra vez la vida entera 
viva vida, cuerpos vivos, almas vivas
que alcen nuevos cantos…
y la sonrisa de Venus con sus hoyuelos
la caricia en el vientre 
luna pálida
y el mundo crisálida tras la espalda
y en el pecho guardado el gran tesoro
y allí que luzca hermoso
tenerlo todo bello y floreciendo
mientras el mundo fuera:
es una fiera
que late distinta y distante 
casi diminuto latido e incorpóreo espacio
sin más materia que la del aire

y en el cielo de madrid 
se escapa de tu alma-noche
cada nostalgia que acorralas contra las sábanas
y la calma no llegará aún mañana
si no se le pide al mañana calma
y de cada aurora se vuelve a hacer en mi
 un sentir:
aquí no hay nadie, ni nada que se moje
y van pasando los lunes y los martes, los días, las tardes y las noches, las semanas
... sé que tú ya has amado 
y has vivido a tu manera un mundo
 entero dequereres
pero sé
o acaso casi lo presiento:
que aún no has sabido amar a nadie
recomenzando el infinito
desprendiendo el verso de las pausas
los silencios de la voz dormida
 y acallada
y ya hecha tu voz el manifiesto 
hecho tu deseo el canto más sincero:
aquí estoy yo y vengo yo
para arrancarle al huracán
las fuerzas 
y al fuego las llamas
para encenderte
y al corazón los temblores:
aquí estoy y vengo yo
para amarte 
mar 
inmenso
y no enmudecezcas nunca bajo un sueño
bajo un no sueño
poeta del vano mundo
 de los hombres
y aquel fue el sueño no sueño
 que nos sostuvo
en el aire…
pero ahora nace y alza el vuelo
 entre tus dedos
celosa la mariposa que se sentía amada…
que ya no vuela con sus alas
ni con las tuyas
ni caen desde las nubes
 verdes esperanzas que siembren nuevos senderos a la luz del alba
y yo bajo otro cielo más lejano al tuyo
y más cercano al mar
 y yo solamente soy carne suave, leve y trémula
aire remando las horas
desarraigando los vientos de los mares
 soy sirena sin canto y soy  mordido silencio
y soy nuca solitaria
y así se hace en mi boca el lamento
y el verbo denso y amarrado
 a la noche de las aguas
el verso desgarrado que pronuncia otra vez
 el nombre de tus almas
sin saber dónde buscar para llegar a hallarlas
y este pincel ya está temblándome de nuevo
 entre los dedos
mientras sigo dibujando el azul pálido
para tus mundos de bruma
borrando con goma azul
cada misterio
de tu amor no vano ensayo
del juego que anda jugándose en la vida
y en los quereres inciertos
la amargura
y verde enredadera que no trepa ni enreda,
ni entra por las ventanas
ni sale…
y en cada azul de los sueños que no alcanzamos
hay un azul que se pierde hacia la nada
y nada luce bonito ni angelado:
está viviendo el llanto que no derramas
prendido a las estrellas y a mis noches
y a tu cuerpo tumbado lejos del este
y a tus manos rotas de verso
y en mi casa hay una orilla deshabitada
donde cae la nieve ahora que hace buen tiempo
y las blancas sábanas
que me cubren del desnudo frente a este mundo
son mi alma rota que te nombra sin quererlo
para decirte:
_¡ Ven, ahora!
sin saber si aún quieres quererlo:_ ¡Ven, ahora!
Dentro de los ojos de la muchacha
de los ojos rasgados
está durmiendo el sonido de la vana tristeza
la vida y la muerte de tu amor
 de niño quebrado
queriéndote ser el hombre renaciendo
que al caminar descalzo sobre la arena
 se levante y se enderece
 se zarandee y se mezca 
se alce y se vuele
se vuelque en beso y en alma y en hoguera
el niño primoroso de cada verso
el que enciende la luz del cielo cuando llega
el que hace que brillen dos luceros
allí en la mirada
de la muchacha rasgada
de la mujer
rasgada de ojos lamento
de mi alma de aire desgarrada
en esta noche
entera desgarrándome
mayde molina
 

 
 
4 comentarios:
Muchas cosas hay aquí, detrás de los versos. Sin palabras me dejas. O mejor, con palabras llenas de sentimientos.
Bs
me quedo siempre perplejo con tu forma de pensar, aunque me encanta más escucharte -cómo será verte jejejejeje-
besos
Ese amor- no amor tuyo de Madrid te está sacando todas las palabras del alma y te está haciendo desangrarte en poemas. Eres una cascada de sentimientos que no cesan.
Cuídate mucho,mi niña.
Un beso.
Para comentar este poema necesitaría una tesis o algo similar.
Y además capacidad para hacerlo.
Simplemente te aplaudo por escribir así de bien.
Besos.
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